jueves, diciembre 6

"INFANCIA CLANDESTINA" GANÓ DIEZ PREMIOS SUR DE LA ACADEMIA DE LAS ARTES Y CIENCIAS CINEMATOGRÁFICAS

“Infancia clandestina”, de Benjamín Ávila, fue la gran ganadora de los Premios Sur de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas de la Argentina, con un total de diez premios “Sur” que en esta séptima edición del evento fueron entregados a las mejores producciones locales estrenadas entre noviembre de 2011 y octubre de 2012.
Numerosas figuras de la industria cinematográfica local se reunieron para entregar o recibir premios en una ocasión en la que las grandes candidateadas fueron, finalmente, las que se llevaron más y mejores premios, dejando afuera a los más taquilleros, como “Dos más dos”, o con firma de autor, como “Elefante blanco”, de Pablo Trapero.
Así, “Infancia clandestina”, que por la misma Academia fue elegida recientemente como postulante argentina a los premios Oscar de su par estadounidense con sede en Los Ángeles, y a los premios Goya, de su par española, con sede en Madrid, que quedarán o no incluidas en sus ternas en enero de 2013, se llevó un total de diez premios.
Los premios recibidos por “Infancia clandestina” fueron los destinados a mejor película de ficción, mejor director (Benjamín Ávila), mejor actriz y actor protagónicos (Natalia Oreiro y Ernesto Alterio), actriz y actor de reparto (Cristina Banegas y el uruguayo César Troncoso), guión original (Ávila y Marcelo Müller), montaje (Gustavo Giani), diseño de vestuario (Ludmila Fincic) y sonido (Fernando Soldevila), compartido con el de El último Elvis.
“El último Elvis”, ópera prima de Armando Bó (nieto), se llevó un total de siete a saber actor revelación (John McInerny), fotografía (Javier Juliá), dirección de arte (Daniel Gimelberg), maquillaje y caracterización (Daniel Moccia), música original (Sebastián Escofet) y el compartido de sonido (Martín Porta), con el de “Infancia clandestina”.
El resto de los premios fueron mejor ópera prima para “Las acacias”, de Pablo Giorgelli, filme que se llevó también el de actriz revelación para la paraguaya Hebe Duarte; guión adaptado a Paula Hernández y Leonel D’Agostino por “Un amor”, según relato de Sergio Bizzio; película documental para “Tierra Sublevada 2: Oro Negro”, de Fernando Solanas, que no estuvo en la velada, y película extranjera para “Hugo”, de Martin Scorsese.
Como introducción, Juan José Campanella que en junio de 2013 estrenará “Metegol”, actual presidente la Academia se dirigió a los presentes y anunció una serie de actividades que la entidad encarará durante el año venidero, entre ellas la obtención de un mecenazgo del gobierno porteño para restauración de sonido de viejos filmes locales.
Al recibir el premio como mejor actriz, que le entregó Virginia Innocenti, Natalia Oreiro estuvo por primera vez en un acto de este tipo junto a Ricardo Mollo. La premiada recibió con emoción el lauro que no sólo le dedicó a su esposo sino a la madre de Benjamín Ávila, que ella recrea según el guión en el filme multipremiado. “Quiero agradecer a Benjamín por confiar en mí para interpretar a Charo –dijo Oreiro-, a todo el equipo compartirlo con mis amigas ternadas, agradecerle mucho a mi amor por acompañarme y estar siempre apoyándome, ayudándome en todo y se lo quiero dedicar a la mamá de Benjamín, desaparecida en 1979”, concluyó.
“Se lo dedico de corazón a todos los hijos de desaparecidos, y todas las Abuelas de Plaza de Mayo, a todos esos nietos que están por aparecer y van a aparecer, a todos los que han luchado y conservado la fe para vivir en la Argentina que tenemos hoy, lo que vivimos hoy es porque hay muchos que ya no están y lucharon para que estemos aquí”, concluyó Ávila.

EN "EL RASCACIELOS LATINO", SCHINDEL INDAGA EN LOS MISTERIOS DEL PALACIO BAROLO DE BUENOS AIRES



“El rascacielos latino” es un inquietante documental, con formato de pesquisa policial, que dirige y protagoniza Sebastián Schindel, en el papel de un investigador que indaga en los profundos misterios que rodean al Palacio Barolo de Buenos Aires, cuya construcción estaría vinculada con “La Divina Comedia”, la masonería y un supuesto plan para extender el fascismo por Latinoamérica.
La investigación de Schindel, que incluye entrevistas, archivos y documentos, busca establecer cuál es la verdad en relación a la muy difundida pero poco probada conexión entre el Palacio Barolo (un imponente edificio de estilo neogótico-neoromántico construido en la década del 20 por el arquitecto italiano Mario Palanti), el escritor italiano Dante Alighieri y su obra máxima, “La Divina Comedia”.
En el camino, y lejos de llegar a conclusiones firmes, el director y protagonista se cruza con innumerables misterios, mitos y leyendas urbanas que indican, entre otras cosas, que Palanti habría sido miembro de una secta mística nacida en el medioevo y que, como tal, tendría el cargo de escudero de un caballero templario: el mismísimo líder del fascismo italiano, Benito Mussolini.
“Palanti podría haber sido un escudero de un caballero templario. En su libro, Dante Alighieri pone a los templarios en el décimo cielo del paraíso, y por encima de ellos sólo estaría Dios. Yo fantaseo con que, quizás, el caballero al que él respondía era el propio Mussolini”, señaló el cineasta, que comenzó a investigar en 2008 con la ayuda de Sandra Cecilini y Josefina Barilari.
En ese sentido, Schindel agregó que “Palanti era un fascista convencido y se puso a las órdenes de Mussolini, le hizo muchos proyectos, pero ninguno fue aprobado. Al final, se retiró de la arquitectura y se fue a vivir al campo supuestamente porque habría perdido el favor del Duce debido a diferentes motivos”.
Entre las razones que habrían motivado la caída en desgracia de Palanti estarían la extraña desaparición de una escultura de su autoría que iba a ser ubicada en el centro del Barolo (hoy en día existe una réplica en ese lugar) y donde planeaban guardar los restos del Dante, y el retraso en la construcción del edificio, que debía terminarse en 1921, al cumplirse 600 años de la muerte del poeta italiano.
Inaugurado en 1923, dos años después de lo previsto, el Palacio Barolo “expresa una arquitectura que iba a contramano de la época y que a nadie le gustaba, porque les parecía un adefesio. Sin embargo -especificó el director- era una arquitectura muy osada que posee una cuestión monumental que lo liga con la arquitectura fascista. Su estilo es neogótico, neoromántico, pero por sobre todo es ecléctico”.
Schindel señaló además que “el estilo ecléctico de Palanti estaba relacionado también con algunos templos hindúes medievales y con un misticismo más esotérico relacionado con otras creencias. Palanti diseñaba templos casi fantásticos, cuya arquitectura era una mezcla de todo y poseía reminiscencias de templos hindúes del siglo XIII”.
Para el cineasta, todos los misterios que rodean al Barolo hacen de su historia “el Código Da Vinci argentino”, ya que en su entorno se mezclan simbologías secretas vinculadas con la masonería (como la A y la flor de lis de los indicadores en los ascensores del Barolo), muertes sospechosas y la existencia de un edificio casi idéntico construido por el propio Palanti en Montevideo, el Palacio Salvo.
En relación a la masonería, las pistas se ramifican y alcanzan al ex presidente Bartolomé Mitre, que llegó al grado 33 dentro de la masonería y fue el primer argentino en traducir “La Divina Comedia”, y a la escultura El Pensador, del francés Auguste Rodin, que representa al propio Dante en las puertas del infierno, fue traída al país por el masón Eduardo Schiaffino y colocada a pocos metros del Barolo, de espaldas al Congreso Nacional.
Amante de la arquitectura y estudiante de filosofía, Schindel señaló que “no hay nada claro, porque la versión turística y la versión académica se contradicen.
La primera da por sentado la relación del Barolo con `La Divina Comedia` y los otros dicen que no hay pruebas documentadas. Por eso salí a buscar cuál era la verdad de todo esto, entrevistando a la gente con un ojo de guionista-director”.
Para intentar dar con la verdad entre tanto misterio, el cineasta realizó una investigación de casi dos años en hemerotecas, bibliotecas, archivos, visitando el Barolo y diversos edificios, haciendo entrevistas a arquitectos e historiadores y encontrando archivos periodísticos que, incluso, comparaban a la arquitectura de Palanti con los grabados medievales de Gustav Doré, el ilustrador de “La Divina Comedia”.
“Fue una investigación casi policial. Siempre tuve claro que el modo y la forma que quería darle a la película era la del policial negro. Todo conducía a datos secretos, a personajes y datos muy misteriosos.
Todo es muy raro en relación a Palanti, no existen fotos suyas y luego desaparece y se va a vivir al campo como un ermitaño, algo digno de una película de ficción”, afirmó.
Schindel, para quien “ponen la piel de gallina tantas casualidades” en torno al Barolo, destacó que “Palanti dibujó muchos templos, al igual que los masones. Tenía un misticismo muy especial e incluso el Barolo parece un templo que podría funcionar como una puerta dimensional, ya que estaría alineado con la Cruz del Sur y la Rosa mística del cielo”.

jueves, noviembre 1

DEDICAN RETROSPECTIVA A LA OBRA DE ANDRÉS DI TELLA EN FESTIVAL DEL PUEBLO DE FIRENZE

Una retrospectiva de las películas del cineasta argentino Andrés Di Tella se llevará a cabo entre el 10 y el 17 de noviembre próximo en el 53ro. Festival del Pueblo de Firenze, Italia, uno de los festivales de documentales más antiguos del mundo, donde además presentarán una instalación y se dará un workshop.
Esta es la segunda retrospectiva que un festival de cine extranjero le dedica en lo que va del año a Di Tella, ya que en abril pasado se realizó una muestra de sus películas en San Pablo, Río de Janeiro y Brasilia, en el marco del certamen E Tudo Verdade de Brasil.
La retrospectiva completa, que es la primera de su tipo en Italia y posee apoyo del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), incluye el último filme de Di Tella, “Hachazos”, un documental sobre el cineasta argentino Claudio Caldini, uno de los pioneros del cine experimental en Súper 8 milímetros del país.
El autor de “Montoneros. Una historia”, “Prohibido”, “Fotografías” y “El país del diablo”, entre muchos otros filmes, también presentará una instalación y el workshop “El cuaderno de apuntes”, donde ofrecerá sus conocimientos sobre el documental, además de analizar algunos exponentes del género.

viernes, octubre 19

EL FIN DEL POTEMKIN, DE MISAEL BUSTOS, GANA EL TERCER FESTIVAL CINEMIGRANTE

El documental argentino El fin de Potemkin, del director Misael Bustos, fue el ganador de la tercera edición de CineMigrante. El festival, que finalizó ayer en Buenos Aires, alcanzó una gran participación del público superando los 6300 espectadores en sus salas durante las funciones y las actividades de debate y formación de la programación.
El galardón fue recibido por el director del largometraje, Misael Bustos, de manos de los integrantes del jurado, que este año estuvo compuesto por el realizador argentino Pablo Giorgelli, el portugués André Santos y la periodista Mariana Carbajal , y de la directora de CineMigrante, Florencia Mazzadi.
El film ganador narra la historia de Viktor quien en 1991, tras la disolución de la Unión Soviética , queda abandonado en Mar del Plata con el barco pesquero en el que trabajaba. Sin rumbo y sin nación, el marinero emprende el desafío de sobrevivir en un país extraño y veinte años después, sin haber regresado a su patria y a la familia que dejó atrás, continúa peleando por subsistir en el destierro.
El jurado otorgó además dos menciones especiales. La primera de ellas fue para Ulises, una coproducción chileno-argentina del realizador Oscar Godoy que cuenta la historia de Julio, un emigrante peruano en Chile que ha viajado para cambiar su vida. La segunda mención del jurado fue para el documental Au Pair (Dinamarca) de Heidi Kim Andersen y Nicole Horanyi, que sigue a tres chicas filipinas que dejan a sus familias y tratan de forjar un futuro mejor en el extranjero.
Por otra parte, se otorgó el premio especial SIGNIS cuyo ganadora fue Imagining Emanuel, de Thomas A. Østbye, un documental proveniente de noruega que indaga sobre la construcción de la identidad y que al mismo tiempo expone el proceso de observación y la forma en que se forja la credibilidad en un documental.
CineMigrante fue co-organizada por el Centro Cultural de la Cooperación (CCC), el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) y se desarrolló en tres sedes de la ciudad de Buenos Aires, con entrada libre y gratuita: CCC, Cine Gaumont y CCEBA.

sábado, octubre 13

ROSENFELD SE METE EN EL ESPEJO DE SILVINA OCAMPO


Daniel Rosenfeld acepta el desafío de llevar al cine una obra de la escritora Silvina Ocampo en el filme “Cornelia frente al espejo”, con Eugenia Capizzano, además coguionista, Rafael Spregelburd, Leonardo Sbaraglia y Eugenia Alonso, que sigue en cartel en varias salas de la ciudad de Buenos Aires.
Para algunos, dueña de un lenguaje literario intraducible, Ocampo (1903-1993) ya había sido llevada a la pantalla grande en cuatro oportunidades (Marcos Madanes, Arturo Ripstein, Carlos Hugo Christensen y Alejandro Maci) y esta vez Rosenfeld lo hace a partir de los diálogos del relato homónimo publicado en 1988 por Tusquets, y Premio del Club de los 13.
“Es un cuento escrito en forma de diálogo, y con Eugenia nos enamoramos de ese material, descubrimos de que parte de esa riqueza tenía que ver en las formas en que estaba construido, y queríamos que ese texto maravilloso estuviera en la película, más allá de nuestro aporte de interpretación cinematográfica”, explicó Rosenfeld.
El relato, que como otros de las cosechas anteriores de Ocampo, tiene claras referencias al surrealismo, y a escritores como Lewis Caroll y Katherine Mansfield, cuenta la historia de una joven mujer dispuesta suicidarse, pero que una y otra vez es interrumpida por personajes rodeados por un aura mágica que la detienen: una niña, una mujer, un ladrón y un amante.
“Algo importante era trabajar los primeros planos con los actores, porque no se trata de una obra de teatro, los encuadres… Lo más fascinante de todo es meterte dentro del mundo de un autor, tener la percepción de que estás conociendo a alguien. Fue difícil y con cierto riesgo de ir por un lugar que no sabíamos si era posible transitar”, dice el cineasta.
Según Rosenfeld, “Había algo inherente al relato de Silvina y a ese mundo que tenía que ver con las digresiones en el sentido cómo describe y relata el tiempo de una manera distinta, no es una línea directa hacia un solo lugar, es algo que se va abriendo, hay algo de eso en el cuento que nosotros queríamos rescatar en la adaptación”.
“La cuestión era cómo traducir este tema de como transcurre el tiempo dentro de esa casa, que es diferente, como si esas palabras y esos fantasmas estuvieran enredadas entre las paredes”, insiste Rosenfeld que contó con dirección de fotografía de Matías Mesa, recordado por “Agua” y “Viaje Sentimental”, de Verónica Chen, entre otras y música del chileno Jorge Arriagada.
La vieja casona vacía, apenas poblada por unos pocos muebles, algunas esculturas que asemejan muñecas, pisos de roble desprolijo y polvoriento, rayos de luz que se atreven a sorprender la soledad de las habitaciones y el apenas perceptible repiqueteo de las ratas por las carpinterías acompañan estos encuentros de Cornelia con sus fantasmas, en el espejo.
La esencia literaria de la menor de las Ocampo (su hermana fue Victoria Ocampo), la presencia del caserón y los niños, los recuerdos que invaden presentes angustiantes y textos que sorprenden por sus múltiples interpretaciones pero siempre atravesados por señales de unas poesía arrolladora, aparecen en el guión, a cuatro manos, de Rosenfeld y Capizzano.
Rosenfeld tiene 39 años, estudió piano, edición y puesta en escena, actuación y tomó seminarios con cineastas de la talla de Kriszystof Kieslowsky, Stephen Frears, Anthony Minghella y Abbas Kiarostami, fue asistente de dirección, por ejemplo de Alejandro Agresti y productor asociado de “Buena Vida Delivery”, antes de lanzarse a la dirección.
De sus comienzos detrás de las cámaras son obras como el documental “(Dino) Saluzzi, ensayo para bandoneón y tres hermanos” (2000), y “La quimera de los héroes” (2003), que tuvo un largo y premiado recorrido festivalero, la segunda fue su encuentro con Capizzano en el guión, quien fue la primera que descubrió el potencial cinematográfico del relato de Ocampo.
Capizzano es una actriz con trayectoria, primero teatral, “Cuinera tropical”, “La paz del hogar”, “Qué hicimos”, y en cine trabajó en “¿Sabés nadar?”, de Diego Kaplan, con Nicolás Alzabert en “Si yo fuera un helecho…”; junto a Isabelle Huppert en “Médée Miracle” y también a las órdenes de Daniel Burman como la odontóloga de “El nido vacío”.
“Ella está en toda la película, y además no hay diálogos improvisados, un tema que no es sencillo de resolver porque tiene que haber algo verdadero pero a la vez no coloquial, y eso para Eugenia y el resto de los actores fue una aventura…”, cuenta Rosenfeld apropósito de su filme, un nuevo y necesario acercamiento a la obra de Silvina Ocampo.

"INFANCIA CLANDESTINA", DE BENJAMÍN ÁVILA, DISPUTARÁ UN LUGAR ENTRE LAS CANDIDATAS A LOS PREMIOS OSCAR




La película “Infancia clandestina”, opera prima de Benjamín Ávila que viene de competir en San Sebastián y de ganar el premio mayor del primer Festival Unasur Cine, fue elegida por la Academia de Cine y Artes Audiovisuales de la Argentina como su representante para disputar un lugar entre las candidatas al Oscar a Mejor Película Extranjera.
"Infancia clandestina" logró 19 votos, seguida en principio cabeza a cabeza por "El último Elvis", de Armando Bo (nieto) con 18, y en tercer lugar "Elefante Blanco", de Pablo Trapero, con 14 votos.
La película de Ávila, que protagonizan Natalia Oreiro y Ernesto Alterio, y cuenta con la sorprendente actuación del niño debutante Teo Gutiérrez Moreno, abrió la sección Horizontes Latinos de la 60ma. edición del Festival de San Sebastián y ganó el premio al mejor largometraje del primer Festival Unasur Cine, que se llevó a cabo en la provincia de San Juan.
En su primer filme, el cineasta y productor miembro del PCI aborda el drama de su propia infancia, a través de un niño que sufre en carne propia ser hijo de militantes montoneros durante la última dictadura militar.
 “La película está basada en hechos reales pero no es autobiográfica ni literal. Hay muchas cosas que son ficción y lo que sucedió realmente está modificado para ese relato”, afirmó el cineasta, quien a sus siete años vivió varias de las peripecias que se desarrollan en la película, como adoptar otro nombre y personalidad, vivir en la clandestinidad junto a sus padres y sufrir interrogatorios.
Emotiva desde el tratamiento humano de su temática, con grandes actuaciones y una puesta en escena cinematográfica sólida y atractiva, “Infancia clandestina” sigue los pasos de Juan, un niño que regresa en 1979 desde su exilio en Cuba para reencontrarse con sus padres, cuadros de peso en la organización Montoneros, que en ese momento preparaba una contraofensiva armada contra la dictadura militar.
Desde su mirada infantil, Juan -alias Ernesto, en homenaje a su ídolo, el Che Guevara- asiste a la gravísima situación que vivía el país en aquella etapa, sufre las dificultades propias de la clandestinidad y su doble identidad, se enamora de una compañera del colegio y expresa sus momentos más difíciles y violentos en imágenes inconscientes plasmadas en excelentes secuencias de dibujos animados.
El director de “Nietos” -un documental sobre hijos de desaparecidos cuya identidad fue restituida por Abuelas de Plaza de Mayo - señaló que “siempre tuve claro que no era una película egocéntrica y que no era yo el protagonista, sobre todo porque quería decir muchas cosas y dar una mirada y un planteo de emociones nuevos con respecto a aquel momento histórico”.
“El tema de la película son las emociones y la importancia de las emociones en las ideas; no el concepto de las ideas, sino las emociones que provocaban esas ideas. En esa época hubo una cuestión emocional muy profunda, con conceptos muy vitales y no tan dogmáticos”, explicó Ávila, quien está orgulloso de haber contado con la producción de Luis Puenzo para hacer esta película basada en hechos reales.
Para el cineasta, el padre (César Troncoso) y el tío (Alterio) de Juan, que forman parte de la misma organización, encarnan “dos maneras diferentes de encarar la vida y la revolución que se estaba gestando, porque cuando uno levanta una bandera corre el riesgo de ser duro y dogmático o puede parecer blando por apelar al corazón y las emociones”.
“Infancia clandestina (o lo que puede imaginar un niño en la clandestinidad de una Argentina convulsionada)” era el título del proyecto original de Ávila, que busca mostrar una mirada diferente sobre el papel de Montoneros en la situación sociopolítica de aquella época, a través de las emociones y la historia de amor de un niño obligado a vivir un crecimiento forzado y una adultez prematura.
“No quería exorcizar con la película nada de mi vida personal, porque eso lo hago con mi psicólogo. Era un compromiso personal, tenía que hacerla, era un deber íntimo, y mi intención era reivindicar esta manera de entender la vida, de jugarse por un ideal pero desde las emociones”, insistió el realizador.
Con la participación especial de Cristina Banegas, como la abuela de Juan, la película también habla, según consignó Ávila, de “las generaciones que estaban separadas por los miedos. Mis abuelos tenían una relación con su cotidiano más burguesa y acomodaticia, mientras que la generación de los 60 y 70 se jugó por un ideal y empezó a luchar para que el mundo dejara de ser de ese modo”.
“Yo hubiera querido ser joven en aquella época. Tener ese nivel de fe y compromiso, la seguridad de que estás cambiando el mundo, era todo. Hoy esas palabras parecen huecas. Si en aquella época estaba en juego todo y valía la pena pelear por los sueños, hoy son muy pocos los que se juegan a fondo por sus ideales”, advirtió el cineasta, quien además interpreta a un interrogador del niño protagonista.
“Ese cameo fue fuerte por muchas razones, porque sentía que ponerme en el lugar del otro me iba a ayudar a diluir ese miedo innato que uno tiene a que lo maten. Cuando te enfrentás a situaciones en las que podrías haber muerto realmente, queda sembrado en tu interior un lugar del temor y el pánico que quizás sea el mismo que quedó sembrado en la sociedad entera”, opinó.
Para Ávila, lo que sucedió desde aquella época es que “las ideas se vaciaron de posibilidades. Todos ahora saben que no se puede cambiar el mundo. Se pasteurizó todo, se juegan juegos cínicos con supuestos cambios que son a futuro. Y esa es una forma menos violenta pero que lleva al vaciamiento de las ideas”.
Sin embargo, Ávila sostuvo que “lo interesante de la Argentina y América Latina hoy es que la idea de ser fuertes regionalmente y juntos generó mucha pasión en los jóvenes que cada vez más se comprometen y se vuelcan a la política. Los adolescentes son como los jóvenes en los 70, creen profundamente en lo que piensan, y por eso son considerados peligrosos por el poder hegemónico”.
En ese sentido, lo que el director rescata de la lucha de Montoneros es que “su ideal era el socialismo, el concepto del todo, en contraposición de la idea individualista tan en boga en los 90. Eso -consignó- lo movía todo, la idea de que el socialismo podía ser implementado, pero justamente el gran problema fue la forma de implementación de ese socialismo”.

lunes, julio 23

"UN MUNDO MISTERIOSO" PREMIADA EN SAN PABLO



La película argentina “Un mundo misterioso”, de Rodrigo Moreno, ganó ex aequo con “3”, del uruguayo Pablo Stoll, el premio Itamaraty al mejor filme del séptimo Festival de Cine Latinoamericano de San Pablo, en Brasil.
El jurado compuesto por Violeta Bava, Erick González, Federico Veiroj, Sandro Fiorin y César Troncoso se pronunció de forma unánime.
En el concurso compitieron películas coproducidas por al menos dos países latinoamericanos como “Bonsai”, del chileno Cristián Jiménez, “Porfirio”, del colombiano Alejandro Landes, “Las malas intenciones”, de la peruana Rosario García Montero, e “Histórias que só existem quando lembradas”, de la brasileña Julia Murat, entre otras.
Tanto “3” como “Un mundo misterioso” comparten casualmente no sólo el origen de coproducción (Argentina y Uruguay) sino que también las mismas compañías productoras, Rizoma y Ctrl-Z, una fórmula ya explotada en los filmes anteriores de ambos directores y de otros títulos también.
“Un mundo misterioso” es la última película de Moreno, quien había ganado en Berlín con su filme anterior, “El custodio”.
Protagonizada por Esteban Bigliardi y Cecilia Rainero, se trata de una propuesta singular en la que el director registra la errancia absurda y existencial de un hombre que es abandonado por su novia y a quien el mundo se le torna inexplicable.
Con la actuación de Rosario Bléfari, Leandro Uria, Germán De Silva y Lucrecia Oviedo, “Un mundo misterioso” es una comedia urbana y por momentos desopilante que narra las desventuras de Boris (Bigliardi), que es dejado por Ana (Rainero) y decide librarse a la deriva y el azar.

DANIELA GOGGI DIRIGE LA SERIE "ENTRE HORAS" EN LA TV PÚBLICA

La cineasta Daniela Goggi es la autora de “Entre horas”, una cinematográfica serie ambientada en una escuela secundaria y con el foco puesto en los contrastes entre la autoridad de los adultos y el universo adolescente, que se emite desde hace una semana en la TV Pública.
Tras la finalización de la estupenda “En terapia”, la temática psicoanalítica se mantiene en la pantalla de Canal 7, ya que en "Entre horas" el psicopedagogo Andrés Vatenberg (a cargo de Agustín Rittano) es uno de los que carga con el peso de la historia.
Entre las aulas y los pasillos de una pequeña escuela pública, el profesional es el encargado de atender las problemáticas de los alumnos, conformando un inquietante tándem con la directora Paula Cortese (asumida por Andrea Garrote).
Aunque ambos enfrentan sus propios problemas personales (la docente está inmersa en resolver el divorcio con el padre de sus dos hijos adolescentes y el terapeuta atraviesa el duelo por la muerte de su hermana y sostiene un noviazgo solamente por costumbre), asumen con determinación los conflictos que surgen en el colegio.
El cuidado tratamiento fílmico impreso por Goggi (autora de la película “Vísperas” y de la “sit-com” “Mi señora es una espía” que se ve en Ciudad Abierta), permite apreciar el entorno y también las vivencias íntimas de quienes habitan el ámbito escolar.
El mejor ejemplo de esa búsqueda personal y dramática se apreció en la puja entre Cortese y su futuro ex marido y, fundamentalmente, en el encuentro entre Vatenberg y una joven que padece problemas con sus compañeros de curso y quiere irse a otro colegio, pero que en la charla va dejando escapar otro tipo de situaciones personales.
La tira con las participaciones de Rafael Spregelburd, Sergio Boris, Amanda Busnelli, Gabriela Ferrero, Lorena Vega, Malena Capobianco, Naiara Awada y Antonio Ziembrosky, completará sus 13 capítulos con emisiones que se verán de lunes a jueves, a las 22.30, por la TV Pública.

LUCÍA PUENZO FILMA "WAKOLDA" CON NATALIA OREIRO Y DIEGO PERETTI


Los actores Natalia Oreiro, Elena Roger, Diego Peretti y el español-alemán Alex Brendemül son los protagonistas de "Wakolda", tercer largometraje de Lucía Puenzo, que adapta una novela de igual título escrita por la cineasta y se está filmando en Buenos Aires y Bariloche, donde transcurre la acción, ambientada a principios de la década del 60.
"La película contará además con un cuidadoso trabajo de diseño para convertir a la Bariloche actual en la de 1960", agregó la directora, contando para ello con una edición que permita recrear aquellas locaciones tal como lucían entonces.
"A primera vista la literatura y el cine se parecen pero son muy diferentes, y la película tendrá muchas diferencias, incluso en personajes, que la novela", explicó Puenzo.
"Wakolda" cuenta la historia de un inmigrante alemán que llega a Bariloche en coincidencia con la inauguración de una hostería a orillas del lago Nahuel Huapi, donde le llama la atención una niña casi adolescente de contextura pequeña para su edad, se acerca a sus padres propietarios del lugar, y será observado atentamente por una mujer que parece conocer su verdadera identidad.
Puenzo explicó que la historia tiene puntos de contacto con la realidad, en especial con la historia de Josef Mengele, el siniestro médico nazi y que se supone vivió un largo período en Bariloche antes de emigrar a Paraguay y luego a Brasil, donde finalmente murió el 7 de febrero de 1979, a los 77 años.
"La película tiene un gran elenco de niños y la misma protagonista es una niña, Lilith, que interpreta Florencia Bado", dijo la realizadora, recordada por sus anteriores películas "XXY" y "El niño pez" y sus relatos "La maldición de Jacinta Pichimahuida" y "La furia langosta".
"Es un thriller psicológico", dice Puenzo, que viene preparando este proyecto hace al menos dos años, a poco de haber terminado su novela.
"Para mí irme de vacaciones significa hacer esta película", dijo Elena Roger, la reciente ganadora del Cóndor de Plata como revelación por su trabajo en el filme "Un amor", de Paula Hernández, recién bajada del avión que la trajo de Nueva York, donde interpreta el papel central del musical "Evita", junto a Ricky Martin.
"Ya hice demasiadas veces a Evita y es hora de que pruebe con nuevas experiencias", señaló Roger, que en esta nueva producción será Nora Edloc, una voluntaria del Mossad (servicio secreto israelí), que está basado en un personaje real, una heroína trágica.
"Es un nuevo gran desafío que se suma al de `Infancia clandestina` que vengo de presentar en Cannes", explicó Oreiro, que incursiona nuevamente en un papel dramático, como ya lo había hecho, por ejemplo, en "Francia", de Israel Adrián Caetano y en "Infancia clandestina", el filme de Benjamín Avila que se estrenará en septiembre.
"La película estará hablada en castellano y en alemán por lo que varios de los actores y parte del elenco está aprendiendo a hablarlo", dijo Puenzo.
"Mi papel es el de Enzo, el padre de la familia propietaria de la hostería, casado con Eva, el personaje de Natalia (Oreiro) y padre de tres hijos, y que es quien recibe a este alemán que le pide que lo guíe hasta Bariloche", explicó Peretti, figura protagónica de la serie "En terapia" que emitía la TV Pública.
"Wakolda es un nombre mapuche y en la historia el de una muñeca importantísima en la trama", dice Puenzo en referencia a la historia que pone en la mira al criminal de guerra alemán obsesionado con la pureza de la raza aria y en Bariloche con una niña de 12 años que parece de 9, y que lo enfrenta.

miércoles, julio 11

TAMAE GARATEGUY INCURSIONA EN EL CINE DE GÉNERO CON "POMPEYA"


"Pompeya", violento filme de la debutante Tamae Garateguy que tiene como fondo uno de los barrios más emblemáticos de la ciudad de Buenos Aires, sigue en cartel en varias salas porteñas después de su estreno comercial el jueves último y tras su paso exitoso en 2009 y 2010 por el Bafici porteño y el Festival de Mar del Plata.
En el filme, varios escritores se reúnen para escribir un guión de una película de gángsters con escenografía bien urbana pero evidentemente sucia en el barrio de Pompeya y se ven involucrados en una trama de descastados, mafias de diferente origen, lealtades, traiciones y muertes, ya sea con disparos certeros o simplemente a cuchillo fácil.
El problema aparece porque, de golpe, la fantasía deja de tener solución de continuidad con la realidad y los personajes de uno y otro lado parecen confundirse, generando un nuevo ámbito, el de la ficción de policial algo barato y el de la realidad del backstage de cine, a veces tan ramplón como el de esos relatos.
Así es la trama del filme con el que la actriz y también cineasta Garateguy debuta en el largometraje en forma solitaria, desafiando la idea de que el cine policial o de mafias es patrimonio exclusivo de los hombres.
"Pompeya" viene de ganar el premio a mejor película argentina en el Festival de Mar del Plata de 2010, que también reconoció a Chang Sung Kim como mejor actor de la sección nacional y es la opera prima en solitario De Garateguy luego del debut compartido con Camilia Toker y Santiago Giralt en 2006 con "Upa! Una Película Argentina", que fue distinguida como Mejor Filme de la Competencia Argentina del Bafici ese año.
Autora de los cortometrajes "¿Quién es Rael?" (2004) y "Humahuaca 70" (2008), la realizadora de "Pompeya" acaba de terminar el primer corte de su segundo largometraje en solitario, "Mujer lobo", acerca de una asesina serial, que estrenará en 2013 y tiene a Mónica Lairana como una mujer que seduce hombres en la Línea B de subterráneos, tiene sexo con ellos y los asesina.
Con "Pompeya" Garateguy es la primera cineasta argentina que encara el policial negro y una de las primeras a nivel mundial en trabajar la violencia, después de la estadounidense Ida Lupino, que en la década del 60 estuvo al frente de series de televisión como "El fugitivo" o "Los intocables".
"Es así porque todavía la mirada sigue siendo machista. Fijate que a ningún hombre le preguntan por qué hace una película con protagonistas femeninas profundas", apunta la autora del filme que lleva el nombre de su barrio natal, donde su abuelo japonés tenía una tintorería.
"Creo que la Argentina es una isla en el sentido de la cantidad y calidad de las directoras mujeres, casi como si los buenos directores estuviesen repartidos mitad y mitad entre hombres y mujeres... Lo que yo no sé es si las mujeres tenemos cierta autocensura a la hora de contar...", reflexiona.
"Una puede meterse en un mundo masculino sin ser por eso ser un hombre ¿se entiende? Siempre tomo el caso de Pedro Almodóvar, alguien que accede al mundo femenino porque ese mundo le atrae", ejemplifica.
Virando la dirección de la charla, la realizadora cuenta que "en la película hay muchos momentos que tienen que ver con la parodia", y aclara también que sucedió algo que no estaba previsto y que fue que "al traspolar el género a la ciudad de Buenos Aires todas las escenas de violencia con armas cobran otra potencia, porque no se trata de una historia en un lugar lejano sino algo muy cercano", asegura.
Garateguy cuenta que en este filme “vuelve la idea de cine dentro del cine" que era parte de la trama central de “Upa!”, y remarca que esta vuelta solo podía hacerla riéndose de sí misma y con autoreferencialidad.
“La idea fue meterme en las bambalinas del proceso creativo de la escritura y poner en relieve situaciones que pasan cuando los guionistas se encuentran con los directores", remarca.
La realizadora agrega que "con Diego Fleischer, mi coguionista, decíamos: `qué bueno sería hacer una especie de actualización del cuchillero, del compadrito, con antihéroes desde la fantasía”.
"Quería personajes virando al cliché, rarezas; de hecho todos tienen nombres en inglés, como Dylan, Shadow, Timmy, Lana, Sharon... La idea de hacer una referencia a los cuchilleros de Borges tiene como meta encontrar cuestiones que anclen en algo que conocemos para generar un nuevo imaginario", insiste.
Por otra parte y acudiendo a una mirada más amplia, Garateguy sostiene, con una sonrisa cómplice, que "se está dando un `nuevo cine argentino de género`", y aclara que "no es un fenómeno solamente local, sino que creo que es algo que está ocurriendo en varios lugares al mismo tiempo: en Uruguay y en Brasil está surgiendo un nuevo cine latinoamericano, de género, muy interesante".
"A mi modo de ver -ensaya- esto surge porque los directores quieren acercarse a la gente, al público y el género, a fin de cuentas, es proponer al espectador un juego que todos conocemos pero que siempre está abierto a la sorpresa: el desafío está en innovar y seguir sorprendiendo, y la gente valora ese esfuerzo", insistió.
Lo dice en relación a "Pompeya" pero también a "Mujer lobo", la propuesta que guarda para 2013 y en la que pone en el centro de la escena el erotismo y el sexo, "todo el sexo que en `Pompeya` puede estar insinuado pero no aparece tan expuesto".

lunes, junio 25

POSICIÓN DEL PCI FRENTE AL CIERRE DEL ARTEPLEX Y LOS VAIVENES EN EL GAUMONT

El cierre del Arteplex y los vaivenes en el Gaumont pusieron el foco en la difícil situación por la que atraviesan las salas con cartelera nacional.   (Nota extraída de la página www.chamuyoweb.com.ar)

El cine nacional pide pantalla y lo hace a través de un grito desesperado ante la amenaza de desaparición de sus pocas pantallas, ejemplificadas en el cierre del Arteplex de Belgrano y el conflicto por el cual el Gaumont tramita figuras legales de resguardo arquitectónico y cultural.
Ambos sucesos son sólo parte de una realidad más compleja y triste: las películas nacionales no pueden competir con las producciones de los "tanques" porque la batalla sigue siendo desigual. Y lo es a pesar de que el Incaa diera un paso adelante con la resolución 2114, a mediados de 2011, en la que estableció aranceles para aquellas películas extranjeras que exhiban sus estrenos en más de 40 pantallas en simultáneo.
"El balance es malo" sentencia el presidente del Proyecto Cine Independiente (PCI), asociación que nuclea a más de 50 directores de cine, Gabriel Lichtmann, sobre la coyuntura para la producción nacional, y señala "responsabilidades compartidas" entre exhibidores, el Instituto y los directores y productores.
En ese sentido, en diciembre último el PCI, junto a Directores independientes de Cine (DIC), Directores Argentinos Cinematográficos (DAC), y la Asociación Argentina de Directores de Cine (AADC), presentaron ante el Incaa un proyecto para repensar la estructura de la cuota de pantalla y el fomento de la actividad, aunque "tuvo eco, pero nada por ahora", según advierte Lichtmann sobre la respuesta del Instituto.
"Cada vez hay menos lugares para exhibición de cine independiente porque es difícil hacer negocio con este tipo de películas", advierten los directores y programadores del Festival de Cine Inusual de Buenos Aires y programadores del ciclo permanente de Cine Inusual en el Arte Cinema de Constitución (Espacio Incaa Km3), Silvia Romero y Fabián Sancho.
Mientras tanto la gente va al cine: en 2011, 42.607.756 espectadores asistieron en todo el país a ver cine nacional, y superaron en más de cuatro millones a los registrados en 2010, según el Incaa; al tiempo que señala un sentido contrario a la tendencia registrada en el área metropolitana de Buenos Aires (Capital y conurbano), donde la tasa de asistencia descendió en un 1,62% para culminar 2011 con 3.496.753 espectadores.
Un solo corazón. En abril se visualizó el conflicto del Gaumont, luego de que los dueños de la sala, la Sociedad Anónima Cinematográfica (SAC), advirtieran sobre la posibilidad de no renovar el contrato que el Incaa posee desde 1995 y cuya vigencia rige hasta 2013.
Y en seguida se corrió la voz de que el Gaumont cerraba, aunque no es tan así. En el hall del cine se comenta que el conflicto se centra en que los integrantes de SAC no se habrían puesto de acuerdo en el porcentaje en que se incrementaría el costo del alquiler y que, ante la posibilidad de que este no se conciliara, surgió la propuesta de adelantarse y "resguardar legalmente su valor arquitectónico y cultural".
Ese es el objetivo del proyecto de ley presentado por el presidente del bloque Frente Para la Victoria porteño, Juan Cabandié, y que se suma a la legislación vigente que protege al Gaumont por encontrarse dentro del Área de Protección Histórica Nº1 de la Ciudad (que impide su demolición o modificación edilicia pero que no condiciona su uso).
El Arteplex de Belgrano, por su parte, dejó de funcionar después de siete años y a pocos días de haber sido sede del Bafici, por "la imposibilidad de seguir afrontando los costos del alquiler y el pago de salarios de los trabajadores", según trascendió en la convocatoria de asociaciones de directores, de actores e intérpretes a dar un abrazo simbólico al lugar y donde juntaron más de 5000 firmas para un petitorio de protección.
La sala cerrada integra (o integraba) la cadena Arteplex, propiedad de Alberto Kipnis y Marcelo Morales, junto a sus homónimas en Caballito, Centro y Del Parque.
Plan de rodaje sin plan de exhibición. La madre de las batallas es la cuota de pantalla, una herramienta que tiene (o que debe implementar) el Estado para establecer cuánto tiempo permanecerá una película en una sala y mediante la cual puede fomentar (o ningunear) la producción cinematográfica local.
La resolución 2114 (de 2011) del Incaa establece, por ejemplo, que si una película se exhibió en hasta 40 pantallas inclusive, el arancel que el productor abonará será del valor equivalente a 300 entradas de cine por el total de las pantallas utilizadas. Del mismo modo, si fue en hasta 80 pantallas, se calculará sobre el equivalente a 1200 entradas; en hasta 120 pantallas, a 2400 entradas; en hasta 160 pantallas, a 6000 entradas; y con más de 161, el equivalente a 12.000 entradas de cine por el total de las pantallas utilizadas.
Sin embargo, el proyecto que el PCI llevó al Incaa cuestiona la resolución porque "no resuelve el problema" y ejemplifica que, por ejemplo, en 2011 un título extranjero desembarcó en el país con 350 copias para su estreno y ocupó más del 40% de las salas. Al parecer, poco intervino la legislación en el cambio de las reglas de juego.
La iniciativa presentada ante el Incaa, además, reclama "medidas de urgencia para defender la pluralidad de voces" y propone nuevos criterios para aplicar a la cuota de pantalla mensual, por ejemplo, para establecer el estreno de cuatro títulos argentinos por cada diez pantallas, que el Incaa difunda los lanzamientos nacionales, que se subsidie el 50% de la entrada a películas locales en salas privadas y se cree un programa de formación de espectadores, entre otras.
"Las películas argentinas tienen mala prensa y difusión, y necesitan dos semanas para contar con el 'boca a boca' y una más para recuperar algo de dinero; pero el mercado está regulado por los multi-cines que no exhiben películas por más de dos semanas que no sean multi-producciones" remata Lichtmann porque "es muy difícil sobrevivir si a uno lo sueltan en un mercado lleno de osos y sin escopeta".
Nota al pié:
Luego de publicada esta nota, el Incaa hizo público tres resoluciones, la 1076, la 1077 y la 1078, que establecen nuevos criterios de cuota de pantalla y de organización del sector. La 1076, por ejemplo, establece que la media de continuidad obligatoria de películas en salas de hasta 250 localidades será de 20% en temporada alta y de 16% en temporada baja; y que en los complejos multipantalla, "la cuota se considerará cumplida cuando se haya exhibido la misma cantidad de películas nacionales que salas registradas haya en ese domicilio".
Asimismo, la regulación 1077 crea un "Calendario Tentativo de Estrenos" por el cual distribuidores y exhibidores deberán comunicar con antelación el listado de películas a estrenar y la disponibilidad de las salas, y serán los "responsables" de que los estrenos sean "en forma equitativa"; mientras que la 1078 instituye metodologías de información sobre la exhibición de las películas. Por ejemplo, los exhibidores deberán informar el listado de salas disponibles hasta 24 horas antes de cada estreno, entre otros.